Si es que lo dicen los lectores con sus críticas y comentarios …
Estos son los últimos que he recibido.
Un escritor:
“Nada antes que opositar” me parece una magnífica guía para los opositores aspirantes al Notariado, basada en tu experiencia personal. Tienes el mérito de introducir una nueva terminología en el mundillo estudiantil. Así, hablas de “opozulos” y “oposicidios” (terrible palabra); te refieres a los “dummies” en el dictamen; al “doping” en las oposiciones; a la figura del “opositer”; de Julio “el puto opositor”…, en fin, toda una delicia. Considero que has hecho un magnífico trabajo que rezuma autenticidad. Y eso, para mí, es lo importante. La valoro mucho. Curioso es también el “ranking” de los noventa y dos notarios mas jóvenes que has elaborado, de 23 y 24 años. Por lo demás, amigo Justito, te envío mi enhorabuena por el trabajo y espero que sigas deleitándonos con tus libros hasta que, una vez jubilado, te animes a escribir tus memorias. Un fuerte abrazo”
¿Garantía anti malos rollos?
“Sería un placer tener tu libro dedicado (aunque solo si asegura que garantiza “pensar en positivo para atraer lo positivo y nada de malos rollos”)”.
Terminaba esta opositora con un ;)) demostrando que me gastaba una broma. Yo le respondí muy en serio cuando le dije:
“Yo no te puedo garantizar ni el éxito, ni el positivismo, ni la ausencia de malos rollos … Solo te puedo garantizar una historia de esfuerzo y superación con final feliz y completamente cierta. No hay ni una sola mentira en mi historia y no encontrarás a nadie que te la cuente como yo”.
Otra opositora me decía
“Por cierto, sigo leyendo tu libro. De momento he llegado a mi capítulo preferido “Aprobar por suerte”. Dices verdades como catedrales. Necesito tener el libro de apoyo, por eso lo leo poco a poco“.
Yo le dije que lo de aprobar por suerte en mi caso fue algo tan excepcional, que aunque fue suerte (y nunca lo negaré), fue una heroicidad lo que hice; fue una heroicidad labrarme aquella suerte que (lo diré una vez más) me condenó a cuatro años de preparación y a otras dos convocatorias. La mayoría de la gente no es capaz de darse cuenta (interpretar, valorar ….) de lo que representó aquello. Casi todos los que tengan una circunstancia así no lo reconocerán jamás. Yo hasta lo he contado en un libro: “Nada antes que opositar (Nihil prius oppositio)”. Algunos piensan, y no les quitaré la razón, que es un libro de cabecera para opositores por lo que todo opositor debería leerlo. Aunque muchos puedan pensar que ya tienen el blog (que es gratis …), se equivocan: en el libro la historia está contada cronológicamente (y de manera ciertamente distinta) y eso le hace ganar mucho valor.
Si a alguien le apetece dedicado, que me escriba a justitonotario@hotmail.com
También lo tenemos en Amazon.
Ya vieeenen los Reyes ….
Hasta otra. Un abrazo. Justito El Notario. @justitonotario
|