Contacto y envÃo
Me recomiendan este vino y me pongo en contacto con la bodega …
Pido doce botellas porque no es posible enviarme menos. Un pequeño inconveniente para algunos pero no para mÃ. De las doce botellas a mi casa solo llegan nueve. Una botellita para cada unos de mis chic@s de la notarÃa para que se conviden a mi salud (si lo estiman conveniente). Esta noche va a caer una de ellas en mi primera cena de viernes en casa desde el mes de junio. La tengo en la cava a perfecta temperatura y la sacaré a la mesa con una de esas (a veces) horribles (pero prácticas y efectivas) fundas enfriadoras. Mi mujer casi siempre requiere al vino “un poco más de frÃo”, asà que siempre estoy preparado en casa para la contingencia. Entre unos saraos y otros a la vista, calculo que no quedarán existencias más allá de finales de octubre y estoy casi seguro de que largo me lo fÃo.
Me gusta comprar directamente a las bodegas. Ganas en precio y rapidez y si son bodegas más bien pequeñas, el trato personal suele resultar agradable. He comprado mucho vino directamente a Pardevalles (mi preferido es el rosado) de León o a Divina Proporción de Toro. Precio, comodidad, rapidez y trato son las ventajas de la compra directa . Desde que contacté con Jorge González Granado, el enólogo de Vinos Thémera, hasta que tuve el vino en mi poder creo que pasaron poco más de 24 horas. El vino llegó en una caja de cartón con separadores de esos que encierran y protegen cada botella a la perfección, sin plásticos de ninguna clase (bueno, el de la cinta de embalar). Me la he guardado y creo que la utilizaré para algún envÃo de vino que tengo pendiente.
El precio con los portes deja cada botella en casa por 9 Euros casi redondos.
Presentación
Me gusta sacar las botellas de la caja y ponerlas todas juntitas en la cocina de casa. Es bonito verlas asÃ. Me gusta el color verde de la cápsula. Se parece al de la hoja de la parra. En la etiqueta más tonalidades de verde y unas madreselvas blancas que esconden el rostro de una mujer. El vino se engloba en el proyecto de Vinos Thémera.
Creo que para cenar voy a preparar unos tallarines. Los haremos con soja y rovellones y complementaremos la pitanza con medio kilo de paletilla de cordero en chuletas. Creo que soy un extraño maridador. Probablemente por eso me doy unos cuantos batacazos y probablemente por eso puedo tener impresiones muy distintas de un mismo vino bebido en momentos y con acompañamientos diferentes. Últimamente bebo mucho más vino blanco que tinto. Véase mi perfil en Vivino y quedará demostrado. Por cierto, estoy el 525º de la clasificación general. A ver si llego a gran crÃtico algún dÃa como ocurrió con Tripadvisor.
Voy a preparar la cena y a ver si soy capaz de hacer una nota de cata.
Cena
Los tallarines con rovellones servidos con un queso rallado en casa han salido fantásticos. Buen toque de soja y pimienta molida. La paletilla tenÃa muy buena pinta en crudo pero no domino la plancha para el cordero. Rico de sabor, pero mala la presentación. Tal vez ha quedado también un poco seco.
Corcho
Sin novedad en el olfato. Todo en orden.
“Nota de cata”
Lo primero que tengo que decir es que no sé hacer una nota de cata. Lo segundo, que bebiendo cerveza y picando mientras cocino no creo que llegue al momento de catar un vino en el mejor estado para hacerlo, pero es lo normal en cualquier comida o cena que uno pueda hacer fuera de casa y en la que te sirvan vino, asà que no creo que esta circunstancia me excluya de catarlo en condiciones. Por otra parte, he asistido a un par de catas de vinos y creo que a mi esto no se me da bien. A mi lo que se me da bien es beberme el vino, ponerle notas o calificarlo no me sale (oigan, que yo soy Notario y eso de las notas y las calificaciones es cosa de “los otros”). Aún asÃ, vamos a hacer un intento.
Una primera impresión que he tenido es que el vino me ha parecido que tenÃa algo más de graduación alcohólica de la que es habitual en los Verdejos-Rueda. No la he mirado previamente y luego he visto que son 13º los que tiene “Madreselvas en flor”. Digamos que está en la parte alta de las graduaciones habituales (según he podido curiosear en Internet) pero los 13º parece que también son “perfectamente normales”.
Segunda impresión (y acabo de hacer trampa porque he buscado en Internet qué podÃa significar lo que habÃa anotado cuando lo cataba), es que el vino me ha parecido menos dulce, “con menor grado de azúcar” que otros Verdejos-Rueda. Leo aquÃ:
“Técnicamente un vino seco es un vino que no tiene azúcar, es decir, que no es dulce y afrutado …
El problema es que mucha gente relaciona afrutado con dulce, lo que no es correcto. Y cuando se pide un vino seco, en realidad se está pidiendo un vino menos aromático en nariz, más neutro o con aroma distinto al floral y frutal. A este tipo de consumidor en realidad le desagrada un aroma muy perfumado y potente sea floral o frutal”.
A mi, este vino me ha parecido más bien seco, menos aromático en nariz y con un aroma distinto al floral y al frutal. Además, aciertan pues no me gustan mucho los vinos demasiado florales o frutales y “Madreselvas en flor” no me ha parecido que lo fuera.
No sé si voy bien …
No he sido capaz de detectar ningún aroma u olor en concreto (me refiero a identificarlo, a ponerle nombre). Solo dirÃa que de olerme a algo serÃa a alguna fruta “exótica”. No creo tener un olfato desarrollado aunque mejoró muchÃsimo desde que no fumo nada de nada desde hace ya casi cuatro años.
Para concluir nos ha parecido un vino fino y diferente.
Y, de momento, parafraseando a Forrest Gump “es todo lo que puedo decir sobre Madreselvas en flor“, aunque, ojo, aún me quedan ocho botellas.
Gracias a Javier y a Jorge por estos disfrutes y por sus originales y siempre bienvenidos darkwines. Os acepto que me digáis que no tengo ni idea de hacer una nota de cata.
Terminó con un corta y pega (pero entrecomillado y citando al autor que no quiero meterme en un lÃo) de la nota de cata que he podido leer en la web de Thémera:
“Se trata de un vino con D.O. Rueda, que sobresale por ser un vino joven y fresco, con una larga explosión aromática y complejidad que resultan de la crianza sobre lÃas. Madreselvas en Flor Blanco 2017 es un vino muy fresco y amable que presenta un color amarillo pálido con reflejos verde limón, y un aspecto cristalino. Nariz fresca y cÃtrica con notas de heno, fruta blanca e hinojo. Boca fresca y amplia con intensidad varietal“.
Confirmado. No tengo ni idea, aunque siendo benévolo conmigo mismo dirÃa que me queda mucho por aprender.
Hasta otra. Un abrazo. Justito El Notario. @justitonotario
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