Aunque ya hemos hablado varias veces del famoso túnel, lo vamos hacer hoy una vez más porque he vuelto a tener noticias de mi amiga Bancaria y no me resisto a contar lo que me ha contado, por una parte, porque lo cuenta maravillosamente bien y, por otra parte, porque compartirlo puede ser útil a los demás opositores. Pero, pongámonos en …
Antecedentes
Hace pocos días me contaba que había aprobado el primer ejercicio de sus oposiciones y que pronto tendría el segundo ejercicio.
Bancaria: “Olvidado tengo a todo el mundo … Estos últimos meses no hago más que estudiar. No tengo vida y he decidido que sea así en las siguientes semanas hasta que me examine del segundo. Llegué al primero mentalizada, controlando los nervios, más o menos tranquila, con muchas ganas y con mucha más seguridad y conocimientos que el año anterior.. Es más, la sensación era “¿cómo podía pensar que el año anterior podía aprobar si no sabía nada…?”. Los días pasan rápido, las horas mucho más y la sensación de agitación mental, de conocimientos, es la leche … recuerdas un tema perfecto y a los tres días no recuerdas nada. El “reseteo” automático e incontrolable es un fenómeno paranormal al igual que las conversaciones con el resto del mundo que a la vez que te entran por un oído, te salen por el otro … Eso sí, la respuesta “a mi no me has dicho nada” es el comodín del público. Las idas de cabeza, la locura transitoria, la irascibilidad “nivel máximo” y que todo es catastróficamente mundial son los niveles normales en los que me muevo últimamente. Después de dos años y medio (casi), me doy cuenta de que me gusta lo que estudio, me gusta lo que podré hacer, me gusta el trabajo que tendré, me veo allí … Ya es por cabezonería … si no es esta, la siguiente lo será. Influyen más factores que no dependen de mi, por lo que no quiero fustigarme pensando que es culpa mía o que no valgo para esto. Tal vez podría haberlo hecho mejor … Me planteé la oposición con toda la prisa, toda la rapidez, toda el ansia de planificación sobre objetivos fijados a la que había estado acostumbrada en mi trabajo en banca durante los anteriores once años. Estaba acostumbrada a trabajar por objetivos y a que casi todo dependiese de mi … Así me planteé el inicio de la oposición, pero cada semana, cada mes que ha ido pasando, ha desmontado cualquier objetivo a corto plazo. Es más, me quedo con la frase de mi Opocompi, “no todo el planing se debe hacer en boli… sino a lápiz, para poder replanificar…” ya que no todo depende de uno, así que eso es lo que hago. Esa compañera está siendo indispensable para mi. Comprensión absoluta y conexión mental a la recíproca durante los dos últimos años. ¡Qué suerte habernos encontrado en la academia¡ Con su compañía es más fácil el camino. Este último año ha sido duro a todos los niveles .. todo se desmorona cuando necesitas mayor tranquilidad, todo se tambalea cuando solo debes estar centrada en lo tuyo .. en fin.. dejándome la piel estoy. Ya queda poco. Ojalá pueda lograrlo, pero de todos modos, si no fuese así .. lo seguiré intentando hasta que lo consiga“.
Lo más reciente es que el final del túnel podría estar ya aquí …
Lo más reciente es que Bancaria está esperando la nota del segundo.
Bancaria: “Aquí estamos a la espera del ansiado y deseado APTO y preparada también para buscarme mil veces en la lista y a que no aparezca mi apellido. El examen fue hace casi un mes. Controlé super bien los nervios y escribí hasta el último momento. La sensación inicial fue de que era un examen fácil; de hecho mientras iba contestando, iba pensando ¡madre mía esta también me la sé¡ La gente al salir del examen, salía con cara entre descompuesta, rara y de terror. Había otros muy ingenuos que salían riendo a quienes les había parecido todo muy fácil. Yo ni hablar podía, solo pensaba en todo aquello que no había puesto, en todas esas cosas que no había leído, en cómo se habían pasado tan rápido las dos horas y media y en todo lo que me faltaba por escribir. Mi teoría es que iba a morir de éxito, no iba a parar de escribir todo lo que podía enlazar y lo escupiría tal cual me viniera a la cabeza. A los días e incluso a las semanas, a la gente se fue viendo el plumero y a muchos ya no les parecía que hubiera sido tan fácil y descubrieron detalles que no se veían a la primera. Yo solo sé que salí del examen con la sensación de ir preparada para la guerra entre la gente que llevamos tiempo preparando y nos sabemos toda la materia aunque no sea a la perfección y la gente que lleva unos pocos meses y se sabe al dedillo los dos procedimientos que primero aprendes (que, por cierto, los preguntaron). Pase lo que pase, estoy orgullosa de lo que he hecho, de cómo lo he llevado y de haber resistido las últimas tres semanas a catorce horas al día, sin hacer nada, sin pensar nada, sin escribir o hablar sobre nada que no fuera la oposición con las consecuencias físicas y mentales que ello conlleva. Entre ellas, perder en un mes y medio la forma física que llevaba trabajando durante nueve meses. Pasadas dos semanas desde el examen empecé a dormir bien y a dejar de soñar con el examen cada noche. Lo que ocurre es que estoy tan desconectada de todo, que no me interesa nada, no presto atención a nada, no recuerdo conversaciones de un día para otro y tengo la sensación de estar flotando en el limbo. Es muy raro todo. Es un paréntesis en el calendario de mi vida que empezó en marzo y que, a día de hoy, me tiene desconectada de mi propia vida. Ahora que empiezan a comentar en los foros que las notas estarán antes del quince de junio me entra un poco el agobio, pero no puedo hacer más que esperar, ir al gym, a la playa y pasear. La incertidumbre es mala y mis ansias de planificar acechan cada vez que me relajo. Así que intento organizar los días para hacer cosas pendientes, “mandaos” y cosas varias que llevo cinco meses sin hacer. Así la espera se hará más llevadera. Ya te informaré si vuelvo a estudiar en un mes … o si empiezo otra vez, pero para preparar por promoción interna el examen de técnicos“.
Justito: Me gusta mucho como cuentas las cosas y me gusta tu buen ánimo, a pesar de todo. Expresas muy bien muchos sentimientos relativos a la oposición y probablemente vuelva a hacer uso de parte de lo que me cuentas. Esperar nota es un momento muy complicado. El corazón te da vuelcos cada dos por tres; cada vez que te acuerdas de que estás esperando la nota te sientes como cuando te pegan un buen susto; estás más o menos tranquilo pero cuando llega un nuevo vuelco dejas de estarlo hasta que consigues distraerte de nuevo con alguna cosa. El aprobado es la cura inmediata. Del suspenso hay que reponerse … y eso es más complicado. No pensemos en ello. Mucho ánimo y mantenme informado.
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Hasta otra. Un abrazo. Justito El Notario. @justitonotario
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