Pues los Notarios tenemos una inusual, atÃpica, organización de las vacaciones. Vaya por delante que los Notarios solemos trabajar más con los años. Menos cuando somos más jóvenes y más según vamos cumpliendo años, puesto que generalmente con la antigüedad vamos alcanzando notarÃas de mayor volumen de trabajo. Fuera de esa circunstancia del volumen de trabajo, somos igual de trabajadores que los demás, es decir, unos nada, otros poco, otros mucho y otros muchÃsimo, con independencia del volumen de trabajo, quiero decir…
Pero es el Reglamento Notarial el que regula esas vacaciones en forma de ausencias y licencias.
ArtÃculo 44
Los Notarios, no teniendo reclamado su ministerio, podrán ausentarse de su NotarÃa o distrito notarial por los plazos y con las condiciones siguientes:
a) Por cinco dÃas si la NotarÃa está demarcada en población donde hay un solo Notario.
b) Por diez dÃas si en la residencia hubiere dos Notarios en servicio efectivo.
c) Y por quince dÃas en las NotarÃas donde residan y presten servicio efectivo más de dos Notarios.
Al hacer uso de este derecho, los Notarios deberán dar conocimiento a la Junta directiva y a la Dirección General de las fechas en que se ausenten y vuelvan a hacerse cargo de su NotarÃa.
De las mencionadas ausencias no podrá usarse por cada Notario más de seis veces al año, ni las ausencias podrán ser sucesivas, debiendo mediar entre una y otra un mes, por lo menos, de intervalo.
ArtÃculo 45
Independientemente del derecho anterior, los Notarios podrán obtener licencias ordinarias o extraordinarias, que serán concedidas por las Juntas directivas de los respectivos Colegios y por la Dirección General.
Las Juntas directivas podrán conceder licencias ordinarias, que no excederán del plazo de un mes en cada año.
La Dirección General podrá conceder licencias ordinarias que no excederán del plazo de dos meses en cada año.
Las licencias extraordinarias sólo se podrán conceder por la Dirección General en casos excepcionales, mediante justa causa y por plazo máximo de un año.
Las licencias se concederán en virtud de solicitud del Notario interesado dirigida al Decano de la Junta directiva, y por conducto de ésta y con su informe, a la Dirección General, cuando a ella corresponda su concesión.
Con el Reglamento en la mano, un Notario de una plaza con más de dos Notarios, podrÃa trabajar ocho meses y ausentarse cuatro. Uno de una localidad con dos Notarios, podrÃa trabajar nueve meses y ausentarse tres y uno de una localidad con un único Notario (mi caso), podrÃa trabajar diez meses y ausentarse dos.
Con el Reglamento en la mano, con independencia del derecho anterior, caben las licencias del ArtÃculo 45 que se añadirÃan a lo que podemos estar ausentes de nuestras notarÃas.
La realidad es que, ni mucho menos, nos tomamos tantas vacaciones, ni podemos permitÃrnoslo puesto que existe libre competencia entre los Notarios y pueden ustedes imaginar lo que ocurrirÃa con la notarÃa de un Notario que se ausente dos, tres o cuatro meses al año y que encima, por si se ha quedado con ganas o está cansado, se pida una licencia de un mes.
Hasta otra. Un abrazo. Justito El Notario. @justitonotario
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