“Estoy acabando el Grado de Derecho y considerando la posibilidad de opositar a notarías. Por ello, estoy informándome tanto como puedo al respecto y quisiera preguntarle acerca de determinadas cuestiones sobre las que tengo dudas o, directamente, un desconocimiento profundo. 

El primero de los asuntos que quiero consultarle se refiere a la entrada al trabajo. ¿Cómo es el inicio? Entiendo que tras el concurso y la asignación de la plaza, uno se dirige a una zona del territorio nacional, pero, ¿a dónde va en concreto?, ¿entra uno a una notaría con sus trabajadores ya en ella?, ¿debe montar el nuevo notario la notaría por sí solo en la zona asignada? Como puede ver, ignoro por completo cómo se desarrolla esa etapa. 

En segundo lugar, quisiera preguntarle por la remuneración del notario. Buscando y rebuscando me encuentro con todo tipo de cifras, que no sé si son brutas o netas, pasando por los que dicen que el Notario cobra mucho y no da palo al agua y por otros que dicen que el Notario cobra más o menos en función de la carga de trabajo que le corresponda. Yo tengo la sensación de que el Notario cobra “algo bien”, pero tampoco sé en qué medida el esfuerzo de la oposición se ve recompensado en ese sentido. Además, leyendo este post suyo no me queda del todo claro este aspecto. 

El tercer punto sobre el que pretendo informarme es el referente a la opción de empezar a preparar por cuenta propia mientras acabo lo que me queda del grado y la de hacerlo mediante el estudio de los temas publicados por la editorial Carperi. Sé que podría, por ejemplo, ir estudiando artículos del Código Civil, pero yo busco acercarme más a los temas y no solo “bordearlos”, como haría al estudiarme los preceptos únicamente (aunque sí que sé que son parte esencial del temario de Civil, claro). Así que, ¿cree que sería desperdiciar el tiempo estudiar los Carperi mientras vaya por mi cuenta? (empezaría con preparador una vez acabado el Grado). 

Finalmente, desearía que me explicase la diferencia entre una notaría de primera, una de segunda y otra de tercera (si es que existe realmente tal distinción)”.

He de decirte que tu consulta tiene varios aspectos que me parecen interesantes y otros que ya he tratado anteriormente por lo que te enlazaré a los posts que los tratan, aunque tal vez pueda aportar alguna cosa más a lo que dijera en su momento.

Te animo a opositar a notarías, puesto que me merece la pena el esfuerzo de hacerlo (y sí, vas a tener una remuneración suficiente, más que suficiente). Es curioso como a mi edad me encuentro con amigos y conocidos de mi tiempo que se han puesto a estudiar a estas alturas, que ansían mejor preparación o la obtención de una plaza fija. En su día algunos fuimos los amargados, los encasquillados, los que estábamos siempre haciendo lo mismo (estudiar, suspender y volver a estudiar), los que vivíamos en “los años de la marmota” y hoy son otros los que se ponen a estudiar, por gusto, pero también, a veces, por necesidad, buscando lo que nosotros tenemos. Además parece que en unos años podríamos tener un incremento del número de plazas …

Entrada al trabajo

1.- ¿Cómo es el inicio?

Superado “El estado más feliz del hombre” empiezas a ejercer como Notario y lo haces en la notaría que te haya correspondido por concurso. Los concursos se van convocando cada cuatro, cinco o seis meses, y en ellos participan los Notarios en activo que lo deseen y, obligatoriamente, todos los nuevos Notarios aprobados en la última convocatoria que no hayan conseguido plaza en concursos anteriores. Si hay suficientes notarías que los que estemos en activo “no queramos”,  una nueva promoción se colocará toda entera; si no hay suficientes notarías, los que resten, esperan al siguiente concurso. Los nuevos tienen que pedir todas las notarías vacantes que haya en España, con lo que el escalafón manda y el número uno de la promoción irá a la primera notaría de su instancia que no haya querido ninguno de los que estamos en activo; el número de dos, lo hará a la primera de su instancia que no haya querido ningún Notario en activo o el número uno de su promoción y así sucesivamente hasta llegar al numero 85 (que son los aprobados de este año), que irá a donde le dejemos todos los demás.

2.- ¿A dónde te mandan?

A donde te toque, de acuerdo con lo expuesto. En estos tiempos hay opciones en el campo y en la ciudad, en poblaciones grandes o pequeñas. Ahí entra el gusto de cada uno. Para mi es importante empezar en un pueblo donde el trabajo suele tener otro ritmo y hay menos presiones y exigencias que en la ciudad, pero evidentemente esto es cosa de cada uno. En las notarías más pequeñas el trabajo es más artesanal, el contacto con la gente más directo y esto suele traducirse en un mayor aprendizaje, que resulta fundamental para los años venideros. Yo soy de los que opinan que en la notaría hay que saber hacer (y para saber, hay que aprender) de todo.

3.- ¿Entra uno a una notaría con sus trabajadores ya en ella?

Desde que el actual Convenio Colectivo entró en vigor, cuando uno llega a una notaría, no hay nunca empleados, lo que ocurre es que en buena parte de las ocasiones, los empleados del anterior Notario estarán disponibles para trabajar con el nuevo y suele haber un porcentaje alto de estos empleados que optan por continuar con el nuevo Notario que no tiene obligación de contar con ellos y que deben haber sido indemnizados debidamente por el Notario saliente (el anterior), según mi criterio. Por supuesto, que también hay notarías que no tenían empleados o que los tenían pero se han ido a trabajar con el anterior Notario a su nueva notaría o a otra o se han jubilado o fallecido. Si no hay empleados, el nuevo Notario tendrá que buscar a los que necesite. No es obligatorio tener empleados. Aconsejo la lectura de dos posts míos sobre este particular. En uno advierto de los riesgos de los parientes o amigos, en el otro hablo de la formación para trabajar en una notaría.

4.- ¿Debe montar el nuevo notario la notaría por sí solo en la zona asignada? 

Sí, el Notario es el responsable de la organización y mantenimiento de su oficina, en todos los sentidos. Es usual encontrarse con muchas notarías organizadas, puesto que cuando existe un solo Notario en la localidad, el sustituto reglamentario ha de mantenerla abierta (normalmente en el mismo sitio) hasta que llegue el siguiente y por eso en estas plazas, uno suele disponer de un montaje más o menos organizado que le hace más fácil comenzar a funcionar. Por supuesto, puedes instalarte en otro sitio dentro del municipio en que esté demarcada tu notaría, si bien es aconsejable efectuar la oportuna consulta en el colegio notarial correspondiente. En mi caso, la notaría lleva instalada unos treinta años en el mismo local por el que hemos pasado al menos cinco Notarios y cuatro sustitutos. Si no recuerdo mal, pedí autorización al Colegio para continuar en él, aunque tratándose de un municipio con una sola notaría, no fue más que una mera formalidad.

Cuando se trata de localidades con varios Notarios, el instalarse en el mismo local que el anterior titular de la plaza está sujeto a autorización previa. Lo mismo ocurre si uno se pretende  instalar en un local que fue notaría de otro Notario pero no de nuestro predecesor en la plaza, pues existe una limitación temporal para que esos locales puedan volver a ser notaría.

Creo que leyendo el Artículo 42 del Reglamento Notarial te quedará claro todo este asunto.

Remuneración del Notario

No eres el primero que quiere saber más sobre el tema de la remuneración. He hablado sobre el asunto aquí y más recientemente aquí.

Sin leer lo que allí dije, te diría que el asunto de la remuneración no debe representar un problema a la hora de decantar la decisión de alguien que quiera preparar notarías. Al menos mientras las cosas sigan como están. Es cierto que entre compañeros de una misma promoción, puede haber diferencias considerables en materia retributiva, pero también es cierto que esas diferencias se acortan en cuanto los de abajo comienzan a cambiarse en los siguientes concursos en que tienen oportunidad a notarías más potentes. En poco tiempo, un par de años me atrevería a decir, todos estamos bastante igualados. Además, las preferencias para concursar y evolucionar son las particulares de cada uno. Hay quien puede primar el dinero, hay quien puede primar estar cerca de la playa o de la familia o en el pueblo con la cumbre más alta de España, por decir algo. Habrá quien prefiera trabajar menos y vivir tranquilo y habrá otro más ambicioso que quiera firmar más, para ganar más. Cuanto más firmes, más trabajas y más ganas. De un modo u otro, cada uno a su estilo, pienso que los Notarios trabajamos mucho y estamos más que bien pagados por ello, aunque no sé si todos estaríamos de acuerdo en decir esto. Diría que entre los que cogieron peor notaría en el primer concurso de mi promoción y los que la cogieron mejor podría haber diferencias de hasta un 80% en los ingresos y que los de abajo podrían hasta ser casi mileuristas (o dosmileuristas), pero también diría que dejaron de serlo en poco más de un año para igualarse con los de arriba. Yo me situaría en una posición intermedia y en unos tres años, ya tuve una mejora considerable en mi segundo destino.

En resumen, que es fácil tener un par de años malos para luego instalarse uno en la tranquilidad económica total.

Por cierto, no cobramos hasta que no empezamos a trabajar.

Empezar a opositar por cuenta propia: “¿Cree que sería desperdiciar el tiempo estudiar los temas de Carperi mientras vaya por mi cuenta? “

Algo he hablado sobre el tema en este post. Añadiré que no, que no me parece mala idea ni empollarse el Código Civil, ni comenzar estudiando los Carperi. El que sea capaz de hacerlo, probablemente debería de hacerlo si tiene claro lo que piensa hacer. Solo se me ocurren como argumentos en contra, que este estudio no debe perjudicar a los propios estudios universitarios, pero si uno es capaz de sostener ambas cosas, ¿por qué no hacerlo? Cuidado también con los sobre esfuerzos que pueden salir muy caros. También diría que si comienzas con los Carperi, continúa con ellos. Lo que no “veo” es comenzar a estudiar unos temas que luego se van a dejar o sustituir por otros suministrados por el preparador a la Academia. Para mi, es fundamental que los temas sean siempre los mismos, debidamente mejorados y actualizados (y supervisados por el preparador), salvo fuerza mayor derivada de cambios de programa o legislativos de importancia.

Diferencia entre una notaría de primera, una de segunda y otra de tercera

Leyendo los artículos 77, 78 y 79 del Reglamento, creo que saldrás de tus dudas, pero te diré dos cosas: Son primeras las notarías de las poblaciones que superan un número de habitantes y las de todas las capitales de provincia y las de Ceuta y Melilla, con independencia de su población. Son segundas las que superan otra cifra de habitantes y terceras todas las demás. Los Notarios tenemos la clase que corresponde a nuestra notaría y la clase es importante para concursar. Lo explico en este post.

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Hasta otra. Un abrazo. Justito El Notario. @justitonotario