Hace un tiempo me hizo esta pregunta, vía Whatsapp, un compañero y esta fue, en esencia, la conversación que mantuvimos sobre preparar opositores:
Justito: Preparar, preparar, no, pero he pensado en hacer pruebas de la manta. Hablando en serio, creo que el aspecto psicológico de la oposición se descuida.
Compañero: Yo también lo creo.
Justito: También creo que no todos los que preparan están preparados para hacerlo. No se puede preparar solamente por tributo a quienes te prepararon a ti o por compromiso. Hay que poner toda la carne en el asador proporcionando los mejores temas y resolviendo los mejores dictámenes.
Compañero: Totalmente de acuerdo. Es una responsabilidad muy grande.
Justito: Yo suspendí un dictamen en el que sobraban tres opositores y yo fui uno de ellos. Es muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy duro.
Compañero: Ya me imagino.
Justito: No creo que el último de los que aprobaron hubiera sido mucho menos burro que yo.
Compañero: No, yo tampoco. Yo sí que preparo y he descubierto una vocación docente que no conocía en mí.
Justito: Y en cuanto a preparar yo, pues ayudé a un par de compañeros de mi quinta a que no lo dejaran después de suspender en el dictamen. Uno había perdido la reserva de nota del primer ejercicio y otro la doble reserva. Solo procuré animarles. Ambos son Notarios. También hice dictamen con otros dos compañeros a los que intenté enseñar todo lo que pude. Ambos son también Notarios. Les pasé todo mi material que era muy bueno. Buena parte de ese material se lo acabó quedando otro compañero para ayudar a sus alumnos en unas oposiciones en las que el Presidente del Tribunal era un reputado preparador de dictamen. O tal vez me lo devolvió, ya no me acuerdo.
…
Las reservas o dispensas de nota en las oposiciones a notarías
Haré un inciso en este post para tratar este tema (que podría dar algo más de sí), puesto que ha salido a colación en nuestra conversación y recientemente me han preguntado sobre las reservas en Twitter.
Os contaré que aparecen con la reforma del Artículo 20 del Reglamento Notarial en 1984. El único ejercicio oral que comprendía todos los temas del programa se divide en dos ejercicios orales a partir de 1987 y en ese año vuelve a modificarse el Artículo 20 para extender la reserva al nuevo segundo ejercicio oral. De la reserva de nota se pase a la que los opositores llamábamos “doble reserva” que era la que “te libraba” de presentarte a los orales en la siguiente convocatoria, frente a la reserva del primero que solo te libraba de éste.
Las convocatorias en que las reservas de nota se pudieron conseguir y utilizar fueron las comprendidas entre los años 1984 y 2004. En la convocatoria de Valladolid del año 2006 dejaron de existir. Si no me equivoco fueron estas las catorce convocatorias con reservas:
2004, 2002, 2001, 1998, 1997, 1995, 1993, 1991, 1990, 1988, 1987, 1986, 1985 y (tal vez) 1984.
Yo fui reserva de nota de los dos primeros ejercicios. La conseguí en las oposiciones de 2001 en Barcelona y la utilicé en las del año siguiente en Madrid en las que conseguí aprobar.
El que tenía reserva era mal visto y bien visto al mismo tiempo. Era un demérito aprobar en dos tandas, pero al mismo tiempo eras un rival peligroso que tenía más cerca la plaza y que había demostrado que podía aprobar la oposición con un nivel superior al de la media. Si hablábamos de dobles reservas entrabas ya en la categoría de intocable. No había muchos. En mi promoción nos presentamos 9 compañeros con doble reserva y aprobamos 8. El 9 lo hizo en la siguiente. Cada uno tendrá sus sensaciones (u opiniones) en cuanto a los reservas de notas. Especialmente recuerdo un comentario que oí a un compañero que creo aprobó en la convocatoria siguiente a la mía que susurró a otro cuando me dirigía a leer mi dictamen: “este tío es un máquina”. Tuvo gracia y fundamentalmente dejaba ver el temor que inspiraban en el resto de opositores, aquellos que solo tenían que hacer el dictamen y no los dos ejercicios previos, puesto que sus plazas estaban medio ganadas. Si, solo medio ganadas y si no que se lo pregunten al número 9 que en las siguientes oposiciones tuvo que comenzar desde el principio, porque las reservas solo servían para la siguiente convocatoria a aquella en que se habían obtenido. Aquel número 9 no ha sido el único en suspender teniendo una doble reserva. Las cosas del temible dictamen….
Al margen estaría el debate de reservas sí o reservas no. Probablemente yo me inclinaría por el sí. Si demostraste conocimientos teóricos en un ejercicio o en los dos, ¿por qué no tener oportunidad de pasar al segundo ejercicio o al tercero en las siguientes oposiciones? ¿Si buscamos los mejores profesionales no es un buen sistema? Supongo que habrá partidarios y detractores y argumentos en favor y en contra, así que dejo aquí el tema al menos por hoy.
…
Compañero: Genial.
Justito: Y luego eché una mano con sus alumnos a MAC, mi preparador, en alguna ocasión. Les tomaba los temas, pero me resultaba muy aburrido y al mismo tiempo me podía la responsabilidad de equivocarme y las dudas. Si me hubiera mantenido en forma con el dictamen, creo que hubiera podido ser útil, pero me marché al quinto pino (Mondoñedo) y perdí la frescura. Ahora lo veo imposible. Desde que tengo el blog me llegan muchos comentarios de preparadores y opositores en cuanto a que mis historias les sirven y les ayudan, así que estoy contento de que mi experiencia sea útil.
Ahora recuerdo a otro compañero que está actualmente en Barcelona con el que coincidí en una boda en Asturias y que vino a verme a mi ciudad para que le aconsejara. También le eché una mano. También aprobó. Por cierto, algún día tengo que contar los saraos en que participé desde que aprobé hasta la toma de posesión, aunque creo que algo tengo contado aquí.
Meses después de esta conversación hubo un intento de comenzar la preparación con un par de opositores. Tuvimos varias cosas habladas y organizadas y estuvimos a punto de empezar, pero al final la cosa se fue al traste. Lo conté aquí. Al margen tengo entre manos el proyecto Open Your Mind, también conocido como “Ah, coño”. También he hablado de él aquí. Es un proyecto a largo plazo que está en sus primeros pasos pero ya completamente en marcha. Veremos hasta donde somos capaces de llegar.
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Hasta otra. Un abrazo. Justito El Notario. @justitonotario
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Saque la oposición en 1979 en dos años y medio con 25 años.Creo que la causa fundamental por lo que ha ascendido en los últimos años el tiempo invertido en preparar es,sin duda alguna,la funesta implantación del Plan Bolonia en las Facultades de Derecho.Estdie la carrera en Sevilla y el Civil y el Mercantil con los maestros Jordano Barea y Olivencia.En Civil tuvimos un parcial sobre el magnífico libro de Lacruz sobre “Lecciones de Derecho Inmobiliario Regístral”;y en Mercantil recuerdo un extraordinario curso monográfico sobre Anónimas y Limitadas.En la actualidad,comparto el ejercicio notarial con mi condición de profesor asociado a tiempo parcial de Derecho Civil.El Civil ha pasado a ser cuatrimestral,lo que obliga a dar en unas sesenta horas la teoría general de las obligaciones,la teoría general del contrato y los contratos en particular.Sin comentarios.Por supuesto el Derecho Hipotecario ni se toca.
Enhorabuena por tu blog que sigo a diario y mi agradecimiento porque ,en algún lugar he leído que mis temas de Mercantil te fueron,en su momento,de cierta utilidad.
Estimado compañero. Así es. Tus temas me salvaron el pellejo cuando no podía con mi alma. Claros, concisos, breves, lo que necesitaba para salir de un imposible atolladero. Creo que te lo dije en un mail. Por lo demás, creo que oposiciones largas y cortas las ha habido siempre y que lo que influye fundamentalmente es el individuo. Si encima rodeas al individuo, de buenas clases, buenos profesores, buenos preparadores, etc…etc…te sales. En fin, cada uno es un mundo y el sistema el que es. Gracias compañero por tu participación y tus palabras. Un abrazo. Justito El Notario.
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Yo creo que serías un excelente preparador en el plano psicológico, de los que faltan muchos. Tienes la empatía necesaria con los opositores, recuerdas tu época de Oposición y además has sufrido una oposición larga…. somos muchos los que a veces necesitamos ese empujón psicológico más que teórico. Mi preparador gracias a Dios lo sabe hacer, pero no siempre ha sido mi preparador y es un plano fundamental.
Ahora hay muchos jóvenes que la sacan muy rápido, increíble, auténticas máquinas, muchísimo conocimiento, pero al ejercer de preparadores les falta la empatía con el opositor sufridor que somos la mayoría, y por todo lo que escribes y como te relacionas con nosotros, los opositores, creo que tú si tienes esa “chispa” necesaria, sin dejar de lado lógicamente la seriedad de preparar.
Querida Paloma: Sin duda en el tema psicológico tendría mucho que aportar.
Es muy interesante lo de los que “la sacan muy rápido” y creo que tienes toda la razón. Mi padre tardó 3 años en aprobar en 1961, mi hermana 4 y medio en 1997 y yo casi 11 en 2002. Imagina nuestras conversaciones sobre el sufrimiento en la oposición.
Gracias por la participación y el comentario. Saludos, Justito El Notario.
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